
Ante la baja por enfermedad de José Enrique Morente, la organización ha decidido contar con la granadina Gema Caballero para formar parte de la jornada de clausura de las XXXII Jornadas Flamencas de Fuenlabrada. Aquí puedes leer una reseña de su actuación.
El reto era difícil: cantar después del joven y prometedor Rancapino Chico y antes de la guitarra inmensa de Rafael Riqueni. Para ello ha hecho falta no sólo saber cantar sino también tener seguridad y aplomo, y de ambas cualidades se ha servido Gema Caballero para ofrecernos un recital que ha estado a la altura del desafío.
Gema decidió comenzar con paso alegre y seguro y nos ha ofrecido los famosos caracoles “Cómo reluce” con su conocida letra:
“La gran calle de Alcalá
cómo reluce
cuando suben y bajan
los andaluces“.
De ahí pasó a la famosa malagueña de Chacón “De aquella campana triste” rematada con una estrofa por verdial
A continuación nos ha cantado una guajira cubana, “Quien canta espanta sus males” y por soleá. Y como remate del tiempo que tenía asignado nos ha ofrecido unas maravillosas “Panaderas” que, bajo el título de “Cortando la rosa” nos ha regalado la siguiente letra:
“Ya no se llaman dedos lo de tu mano.
Que se llaman claveles, cinco en un ramo“.
Gema ha acudió Fuenlabrada con muchas ganas y con un cante largo y lleno de vida. El público aplaudió en varias ocasiones su derroche vocal y su energía. Excelente muestra de su cante, que nos ha dejado con ganas de más.
A la guitarra le acompañóJavier Patino, rebosante de nueva música procedente de su último disco, “Oro negro“, que hoy ha troceado a modo de elaboradas falsetas que han enriquecido aún más si cabe el cante cristalino de Gema.